El xoloitzcuintle: un perro milenario**
El xoloitzcuintle: un perro milenario**
El xoloitzcuintle o xoloescuincle es una raza canina originaria de México, que se caracteriza por su escaso o nulo pelaje y su piel arrugada. Es considerado uno de los perros más antiguos del mundo, con más de siete mil años de existencia. Además, tiene una estrecha relación con la cultura mexica y otras civilizaciones mesoamericanas, que lo veneraban como un animal sagrado y un guía de las almas en el más allá.
En este artículo te contaremos todo lo que debes saber sobre el xoloitzcuintle: su historia, sus cuidados, su personalidad, su relación con los humanos y otros perros, y sus características más destacadas.
**Historia del xoloitzcuintle**
El xoloitzcuintle es una raza autóctona de México, que se cree que se originó en el estado de Colima. Según algunos estudios genéticos, el xoloitzcuintle desciende del lobo gris mexicano y comparte un ancestro común con el perro sin pelo del Perú y el perro sin pelo chino.
El nombre de xoloitzcuintle proviene del náhuatl y significa "perro acompañante". Esto se debe a que los mexicas y otros pueblos mesoamericanos creían que el xoloitzcuintle era un regalo del dios Xolotl, el dios de la muerte y el gemelo de Quetzalcóatl. Según la mitología, Xolotl creó al xoloitzcuintle con una astilla del hueso de la vida, para que fuera el compañero y el protector de los humanos.
Los mexicas consideraban al xoloitzcuintle como una representación viva de Xolotl, que tenía el aspecto de un hombre con cabeza de perro. Además, le atribuían la función de guiar a las almas de los difuntos por el camino al Mictlán, el inframundo. Por eso, cuando alguien moría, se sacrificaba a un xoloitzcuintle y se lo enterraba junto al cadáver, para que lo ayudara a cruzar el río que separaba a los vivos de los muertos.
El xoloitzcuintle también tenía un valor medicinal y terapéutico para los mesoamericanos. Se le usaba para tratar dolencias reumáticas, musculares, insomnio e incluso malaria. Se creía que su calor corporal era beneficioso para aliviar el dolor y curar las enfermedades. También se le consideraba un buen perro de compañía para las personas asmáticas.
Tras la llegada de los españoles al continente americano en el siglo XVI, el xoloitzcuintle sufrió un marcado declive debido a la colonización y la introducción de otras razas caninas. Los españoles despreciaban al xoloitzcuintle por su aspecto y lo confundían con un caballo enano o un animal enfermo. Además, lo cazaban para alimentarse o para usar su piel.
Sin embargo, gracias al esfuerzo de algunos criadores que buscaban preservar esta raza ancestral, el xoloitzcuintle logró sobrevivir y recuperarse en el siglo XIX. En los años cincuenta, la Federación Cinológica Internacional (FCI) reconoció al xoloitzcuintle como una raza oficial y tomó medidas para protegerla y promoverla.
Actualmente, el xoloitzcuintle sigue siendo un perro muy querido y valorado en México y en otras partes del mundo. Es considerado un patrimonio cultural y un símbolo de la Ciudad de México desde 2016. También ha sido protagonista de diversas obras artísticas, como las pinturas de Frida Kahlo o la película "Coco" de Disney-Pixar.
**Cuidados del xoloitzcuintle**
El xoloitzcuintle es un perro que requiere unos cuidados especiales debido a su falta de pelo y su piel sensible. Estos son algunos consejos para mantenerlo sano y feliz:
- Protegerlo del sol y del frío. El xoloitzcuintle es muy vulnerable a las quemaduras solares y a las bajas temperaturas. Por eso, se le debe aplicar protector solar en la piel y abrigarlo con ropa adecuada cuando salga al exterior.
- Hidratar su piel. El xoloitzcuintle tiene una piel seca y propensa a las irritaciones. Por eso, se le debe dar una alimentación rica en ácidos grasos esenciales y aplicarle cremas hidratantes o aceites naturales en la piel con regularidad.
- Limpiar sus oídos. El xoloitzcuintle tiene unas orejas grandes y erectas que pueden acumular suciedad y cera. Por eso, se le debe limpiar los oídos con un paño húmedo o con un producto específico para evitar infecciones.
- Cepillar sus dientes. El xoloitzcuintle tiene una dentadura incompleta y débil, que tiende a perderse con el tiempo. Por eso, se le debe cepillar los dientes con un cepillo y una pasta adecuados para prevenir el sarro y las caries.
- Bañarlo con frecuencia. El xoloitzcuintle no tiene mal olor ni suelta pelo, pero necesita bañarse cada dos o tres semanas para eliminar la suciedad y las células muertas de su piel. Se le debe usar un champú suave y secarlo bien después del baño.
- Cortar sus uñas. El xoloitzcuintle tiene unas uñas fuertes y largas que pueden causarle molestias o heridas si no se cortan con regularidad. Se le debe usar un cortaúñas adecuado y tener cuidado de no cortar el nervio que hay dentro de la uña.
**Personalidad del xoloitzcuintle**
El xoloitzcuintle es un perro inteligente, fiel, cariñoso y alegre. Tiene un temperamento tranquilo y equilibrado, pero también es alerta y vigilante. Se lleva bien con los niños y con otros animales, siempre que se le socialice desde cachorro.
El xoloitzcuintle necesita hacer ejercicio diario para liberar su energía y mantenerse en forma. El tamaño miniatura necesita unos 30 minutos de actividad al día, mientras que el mediano y el estándar necesitan una hora aproximadamente.
El xoloitzcuintle también necesita estimulación mental para evitar el aburrimiento y las travesuras. Se le puede enseñar trucos, juegos o deportes caninos como el agility o el flyball.
El xoloitzcuintle es un perro fácil de adiestrar, ya que aprende rápido y tiene ganas de complacer a su dueño. Sin embargo, también puede ser testarudo o independiente a veces, por lo que se necesita paciencia y constancia. Se recomienda usar el refuerzo positivo y evitar los castigos físicos o verbales.
**Características del xoloitzcuintle**
El xoloitzcuintle es un perro de aspecto exótico y elegante, que llama la atención por su escaso o nulo pelaje. Estas son algunas de sus características físicas más destacadas:
- Tamaño: existen tres variedades de tamaño: miniatura (25-35 cm), mediano (36-45 cm) y estándar (46-60 cm).
- Peso: el tamaño miniatura pesa entre 2 y 9 kg, el mediano entre 10 y 17 kg, y el estándar entre 18 y 25 kg.
- Pelo: la mayoría de los xoloitzcuintles son sin pelo o tienen muy poco pelo en la cabeza, la cola y las patas. El color de la piel puede ser negro, gris, rojo, bronceado o manchado. También existe una variedad con pelo, que tiene un manto corto, liso y brillante de cualquier color.
- Cabeza: la cabeza es alargada y estrecha, con un hocico fino y una trufa negra o rosada según el color de la piel. Los ojos son almendrados y de color oscuro o claro según el color de la piel. Las orejas son grandes, triangulares y erectas.
- Cuerpo: el cuerpo es delgado y musculoso, con una línea superior recta y una línea inferior ascendente. El pecho es profundo y las costillas son arqueadas. El lomo es corto y fuerte. La cola es larga y delgada, y se lleva baja o enroscada sobre el lomo. Las extremidades son largas y rectas, con unos pies alargados y unos dedos bien separados.
**Conclusión**
El xoloitzcuintle es un perro único y fascinante, que forma parte de la historia y la cultura de México. Es un perro leal, afectuoso y protector, que se adapta bien a diferentes ambientes y familias. Sin embargo, requiere unos cuidados especiales para su piel y su salud. Si quieres tener un xoloitzcuintle como mascota, debes informarte bien sobre sus necesidades y su personalidad, y asegurarte de ofrecerle una vida feliz y digna. El xoloitzcuintle es más que un perro, es un patrimonio vivo que debemos respetar y conservar.
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